NAC es una forma estable del aminoácido no esencial cisteína, contiene azufre y actúa como estabilizador para la formación de estructuras de proteínas, promoviendo la formación de glutatión.
N-acetilcisteína (NAC) es un tremendo antioxidante que se utiliza para reducir el estrés oxidativo.
Sabemos que oxidación es igual a envejecimiento. Los radicales libres dañan nuestras células y nos oxidan, y, por ende, al oxidarnos, envejecemos.
Como decíamos, en el interior del cuerpo humano la N-Acetilcisteína se convierte en la enzima antioxidante glutatión.
El glutatión es un tripéptido que se encuentra en las células y cuya función es protegerlas de la oxidación.
Dadas estas propiedades antioxidantes de la N-Acetilcisteína en cuanto a favorecer la creación de glutatión por nuestro organismo, su uso en
determinadas dosis también ha demostrado una capacidad anti-mutagénica y anticancerígena.